"Pedrito el Telescopio narra las aventuras de un niño que sueña con ser capitán de barco y un superhéroe que surca los cielos a lomos de su dragón. Rodeado por una familia muy peculiar, Pedrito descubrirá que no es tan raro como los demás creen... sino más bien "especial"."
"Pedrito el Telescopio" & "Pedrito el Telescopio y los vecinos del barrio"
Reseña de Ana López, profesora de Lengua y Literatura de secundaria del Instituto Federico García Lorca (Granada), sobre PEDRITO EL TELESCOPIO:
“Pedrito el Telescopio” es el primer libro de una serie de novelas de aventuras que tiene como protagonista a un niño. Hasta aquí nada nuevo, podríamos pensar que se trata de uno de los tantos seguidores que ha tenido “Manolito Gafotas”. Pero si adelantamos que Pedrito tiene una cualidad muy especial, rápidamente nuestros pensamientos se van hacía Harry Potter. Pues tampoco. Nuestro personaje principal es un niño de diez años, prototipo del antihéroe, que busca ser querido y que, en su empeño, logrará transformar su “defecto” en un don.
A lo largo de doce capítulos, su autora, Mª Ángeles Guarnido, nos presenta, en esta novela de aprendizaje, el mundo de Pedrito, un irónico bosquejo de la sociedad actual que hace saltar a la historia fuera de los límites de la literatura infantil y la convierte en una obra para todos los públicos. Pedro es abandonado por su madre, al poco de nacer y está siendo criado en la casa de sus abuelos por su tía y su padre. Desde bebé es señalado como “raro” y en el colegio sufrirá los continuos hostigamientos de sus compañeros. Sin embargo, Pedrito tiene una lista de sueños que le gustaría cumplir antes de ser mayor… y que a más de un lector nos gustaría suscribir.
Realidad y la fantasía se encuentran maravillosamente engarzadas a través de la descripción de los personajes, trazos humorísticos de arquetipos reconocibles- Petra y Leopoldo-, y tan entrañables como Rosa y el abuelo. Verosimilitud conseguida gracias a un lenguaje, natural y desenvuelto, y a una historia, cándida pero enigmática a la vez , que nos atrapa desde el principio. Su lectura evoca tanto a leyendas de las mitologías, al Lazarillo, a Robison Crusoe, a Alicia en el País de las maravillas, a los superhéroes de los cómics y de las series televisivas, como a los compañeros, de carne y hueso, que todos hemos tenido o que alguna vez fuimos.
Si bien es cierto que una reseña trata de ser objetiva, también lo es, que resulta muy difícil separar la lectura de un libro de las circunstancias extraliterarias que lo acompañan. Como bien saben los teóricos de la crítica de la recepción. De ahí que aconsejo a los lectores que siempre que les sea posible, compartan esta lectura con los niños. Les resultará deliciosa. Por suerte he tenido la ocasión de comprobarlo con mi sobrino y gracias a Santi el “horizonte de expectativas” y el “horizonte de experiencias” nos ha enriquecido… sobre todo a mí, que tanto tengo que aprender de él.
Hace poco Martín Garzo nos recordaba en un hermoso artículo que los cuentos son “ la casa de las palabras”, “ un refugio frente a las angustias que provocan las incertidumbres de la vida”, ojalá que el universo de “Pedrito el telescopio” nos siga acompañando a todas las edades en nuestras vidas y nos albergue.
Ana López Muñoz.
